Descripción |
Esta tabla, que representa el Nacimiento de la Virgen, formaba conjunto con el Abrazo de san Joaquín y santa Ana y la Adoración de los Reyes. Parece que nunca se colocaron en el lugar para el que fueron realizadas, pudiendo contemplarse en la Sacristía de los Cálices. En esta composición, Fernández dispone a los personajes en dos planos sucesivos que ocupan la altura de la tabla, otorgando a los personajes una galería de gestos que refuerzan la profunda intimidad del nacimiento. |